viernes, 14 de febrero de 2014

Todos somos iguales

A finales de septiembre del año pasado (2013) vi el vídeo que cambiaría mi vida, de Gary Yourofsky 'The best speech you'll ever hear'. Y debo confesar que al principio se trataba de morbosidad y nada más, pero conforme pasaban los minutos en el vídeo me dí cuenta de una  cosa: todos somos iguales, por lo tanto todos tenemos derecho a la vida; aunque éste no sea el caso de la mayoría de los animales.  A partir de ese día dejé drásticamente algunos de los productos de origen animal, por ejemplo: carnes rojas y blancas, gelatinas y embutidos; convirtiéndome en una persona ovolactovegetariana. 
Fue un sacrificio grande y necesité fuerza de voluntad, pues como la mayoría de ustedes fui educada en un hogar carnívoro. Había comido animales durante diecinueve años.  Fue un proceso muy difícil porque lo hice de una manera drástica y tal vez errónea. Dejé de consumir lo que siempre había consumido, afectando mi salud y bajando las defensas, pero fue un riesgo que valió la pena. 
Muchas personas tienen la idea equívoca de que los vegetarianos no comemos más que lechuga, pero no es así. Existen diferentes tipos de vegetarianismo y abajo les mencionaré las más comunes: 
Ovolactovegetarianismo:  Se es permitido comer huevos y lácteos, así como la miel, excepto carnes o peces. 
Lactovegetarianismo: No consumen carnes, peces ni huevo, pero sí lácteos. 
Ovovegetarianismo: Son los vegetarianos que se permiten consumir huevo y miel. 
Vegetarianismo estricto o veganismo: Son quienes no consumen absolutamente nada de origen animal; ya sea alimentación, vestimenta, ocio, etc.

¿Qué es la carne?

La grasa de las carnes aumentan en un 40% las probabilidades de sufrir de cáncer o enfermedades cardíacas, así como otro tipo de padecimientos como obesidad, apendicitis, osteoporosis, diabetes, etc. 
La carne que se vende contiene gran cantidad de pesticidas; el nitrito también se encuentra en la carne,  y es un componente cancerígeno para mantener el aspecto rojizo; de otra forma la carne estaría verde y putrefacta. Y efectivamente la carne es una fuente rica en proteínas y nuestro cuerpo la necesita, pero éstas se pueden conseguir por otro tipo de alimentos, por ejemplo: legumbres, cereales,  la soya y sus derivados, y los vegetales. 

Los animales  

De todo el maltrato animal que existe en el mundo, podría decirse que las granjas es donde posiblemente los animales sufren más. Ya es bien sabido que los animales pasan por tortura antes de ser asesinados para que después sean vendidos como comida.
A los pollos casi recién nacidos se les quema el pico; los bueyes y cerdos son castrados sin anestesia; se les cuelga de cabeza y se les corta la garganta aún estando conscientes. Estos animales pasan todo el tiempo encerrados en lugares con amoniaco, además de estar amontonados unos con otros sin agua y comida durante horas. La mayoría de las personas creen que ellos no razonan, no piensan y que no son inteligentes. Pero en realidad, ellos saben que van a morir cuando van dentro de esos camiones que los trasladarán a los mataderos.
Las vacas son bastante inteligentes y curiosas. Su vista hace que puedan percibir más los colores y la luz. Son animales que se sobresaltan fácilmente; si ellas ven alguna sombra en el suelo es difícil que se acerquen a esa zona porque les da miedo. También tienen un tacto muy sensible, pueden percibir lo más ligero en su piel, por lo tanto no tienen ninguna sensación agradable cuando son perforadas en las orejas para ser identificadas. Estos animales son  uno de los  más maltratados para la producción de alimentos: son severamente explotadas para la producción de leche. Ellas como las madres de raza humana, producen leche para amamantar a su cría y no para alimentar a la población entera. Sufren  traumas desde el momento que las separan de sus hijos, los cuales son enviados al matadero, y en ocasiones las vacas hembras recién nacidas están destinadas a la explotación lechera.
Para la producción de leche en las granjas, las vacas permanecen en cubículos y son inseminadas una vez al año, para alterar sus genes y así poder producir aproximadamente 45 litros de leche al día, es decir, 10 veces más de la que debe producir para sus crías. Esto les provoca dolor en las ubres y sus articulaciones, y cuando la vaca deja de servir por su leche, es subida a un camión y posteriormente enviada al matadero para ser asesinada.
En otro de los casos, los peces son asfixiados al sacarlos de su hábitat natural. Una forma de pesca muy común es lanzar a la superficie marina una red en la cual los peces que pasan nadando terminan atrapados hasta que la red esté completamente llena. Eso les produce un estrés y desesperación inmensa. Son tantos peces los que están ahí, que con el mismo peso se van aplastando unos contra otros, al grado de que sus globos oculares salgan de órbita y revienten, o incluso que expulsen el estómago y el esófago por la boca.  La compensación que sufren es extremadamente dolorosa.  Los peces que salen vivos de la red, son descuartizados en los barcos de pesca, y se ha comprobado que después de destriparse a los peces en los barcos, estos animales pueden durar alrededor de una hora conscientes revolviéndose debido al dolor.
Cabe recordar que eso solo es un ejemplo de dos especies  animales que sufren para ser convertidos en alimentos; hay miles más que sufren la misma explotación y dolor, tales como las gallinas, becerros, patos, conejos, cangrejos, entre otros.
Solo tómate el tiempo de analizarlo: ¿Quién te da el derecho de quitarle la vida a otro ser vivo? ¿Por qué el privar de la vida a un ser humano puede ser penalizado y no sucede lo mismo con un animal? Todos somos iguales; nosotros somos animales pensantes y evolucionados; los animales que no son de nuestra especie pueden sentir dolor y amor como el ser humano.


¡SÍ al derecho e igualdad animal!




Frida Alejandra Báez Gloria


www.haztevegetariano.com/p/506/sabes_que_es_comer_carne

http://www.youtube.com/watch?v=pUeF-UUkqA4


No hay comentarios:

Publicar un comentario